Era un sentimiento
único casi sublime
lo que sentí por
aquél ser,
tan lleno de
elegancia
tan lleno de placer.
Pero como tal pecado
no pudo ser,
tuve que alejarme
y verlo fenecer...
Mi admiración era
en silencio como aquél
amor negado por
ser pecado.
Día con día perecía
por el temor infundado
a no ver nacer un amor
tan solo por ser el,
un sueño prestado...
~Arely Huber
2013 ©
muy bueno tu poema felicitaciones
ResponderEliminarMuchas gracias, un abrazo!
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