No te imaginas cuanto es lo que te amo.
No interrumpo tus exclamos, silente permanezco.
Tolero "aquéllo" que juzgas de mí sin motivo.
Reprimo mis manos carcomidas por la espera;
unas palabras,
un roce, son sueños sucumbidos;
aun así conservo intacto tu lugar,
aunque sé que aquí, ya no volverás.
~Arely Huber
D.R.2017
No hay comentarios:
Publicar un comentario